El Taekwondo y Rodrigo Gozzano: un campeón que motiva a Lincoln

Campeón mundial de Taekwondo, atleta reconocido y un maestro que inspira a nuestros alumnos. Conocé a nuestro profesor de artes marciales.

¿Con la pasión se nace o se desarrolla? En el caso de Rodrigo Gozzano, profesor de Taekwondo de Lincoln desde hace 10 años, parece ser el primer caso. Vecino de Vicente López, profesor nacional de Educación Física, instructor de Taekwondo ITF (International Taekwon-Do Federation) con 12 años de experiencia y creador de la escuela de Taekwondo ITF Peru Beach (ABATI), Rodrigo no tiene techo cuando se trata de perseguir su vocación.  

Pese a los constantes esfuerzos que demanda su profesión, él nunca perdió la motivación. Trabajo, estudio e incontables horas de entrenamiento lo llevaron a ser campeón del mundo en varias ocasiones. Entre sus logros más recientes, Rodrigo fue overall el mejor competidor adulto masculino en el  XI AETF Open European Cup Bulgaria 2022 por haber ganado cuatro medallas de oro en total, entre ellas medallas en individual en formas, lucha y lucha preestablecida. Además, junto a la Selección Argentina de Formas obtuvo el primer puesto en ese campeonato. 

Ahora nuestro atleta se está preparando para participar en octubre en la Copa del Mundo de Taekwondo, que tendrá lugar en Koper, Eslovenia. “El Taekwon-Do es amateur y en mi caso no recibo ninguna ayuda económica. Siempre buscamos sponsors que nos ayuden, colaborando con estos proyectos”, adelantó Rodrigo en su entrevista. 

El impacto del Taekwondo

Sus logros en Lucha Pre establecida, técnicas de habilidad (saltos, romper tablas) y trabajo con la Asociación Argentina de Taekwondo ITF lo convierten en un referente del deporte. Pero lo que Rodrigo más aprecia es lo que el Taekwondo aporta a su vida. La disciplina del arte marcial y los valores duraderos que otorga, como el respeto, la perseverancia, la integridad y la cortesía, han consolidado su estilo de vida y sus actitudes diarias.

A lo largo de su carrera, y en todo seminario y clase que dio, siempre comunicó esos pilares, además de enseñar habilidades que ayudan a todo estudiante, como la concentración y el trabajo en equipo. Su pasión lo convirtió en un atleta destacado, un miembro de la comunidad muy querido y una persona admirable. Entrevistamos a Rodrigo para que la comunidad conozca mejor a nuestro profesor de Taekwondo. 

¿Cómo fue competir en el XI AETF Open European Cup Bulgaria 2022? 

La experiencia fue muy gratificante, tuve el reconocimiento de muchos referentes mundiales y también fue muy lindo después de 8 años de estar en la selección, ser el capitán del equipo. Por un lado, de este viaje volví con muchos aprendizajes que compartiré con nuestros alumnos y por otro lado volví muy feliz de ver que con constancia y esfuerzo se pueden lograr los objetivos propuestos.

¿Cómo entró el Taekwondo a tu vida?

Cuando tenía siete años mi actual maestro Eduardo Barile empezó a dar clases de Taekwondo en el colegio que yo estudiaba. Así que rápidamente me anoté para comenzar con la actividad ya que estaba muy interesado.

¿Qué fue lo que te atrajo de este deporte?

Al ver películas de artes marciales, primero me atrajo todas las destrezas físicas (saltos, patadas, giros, etc), aunque con la práctica fui descubriendo que el Taekwondo es mucho más que eso. Luego de un tiempo me atrajo mucho la idea de superarme día a día a través de un entrenamiento físico y mental. 

¿Cómo se complementa tu carrera en el Taekwondo con la práctica de la enseñanza en el Lincoln?

Gracias al Taekwondo pude viajar alrededor del mundo durante los últimos 6 años y eso me ayudó a conocer diferentes culturas, de las cuales muchas de ellas están presentes en Lincoln. Por otro lado, competir internacionalmente junto a la selección argentina hizo que aumentara mucho mis conocimientos acerca de los diferentes sistemas de entrenamiento. Toda mi experiencia se traslada en cada clase que doy.

¿Qué es lo que más te gusta de enseñar en el colegio?

Lo que más me gusta es la buena energía de los practicantes a la hora de aprender y que nuestro Dojang (lugar de práctica) tiene vista al río. Eso es hermoso.